LOS PADRES DEBEN SER AMIGOS Y CONFIDENTES DE SUS HIJOS

El ser padre o madre es un don maravilloso que DIOS nos lo otorga, muchos recordaremos los momentos hermosos de la concepción y como nuestro hijo (a) fue creciendo mientras que nosotros por nuestros sentidos tuvimos la evidencia de la vida. Ese crecimiento biológico continua durante toda la vida del ser humano. Cuando nuestro hijo  (a) estuvo dentro de vientre no le faltaba nada, era maravillosamente feliz; sin embargo cuando nacen nuestros hijos vienen desnudos, necesitan el abrigo, alimentación  y protección de los padres para poder sobrevivir a las condiciones adversas de la vida. El ser humano para caminar requiere caerse aproximadamente 200 veces, ahí los padres están para enseñarle a caminar por el sendero de la vida. Nuestros hijos poco a poco luchan por sobrevivir y imponerse al resto de amistades. En esa lucha los padres debemos de educar sin golpear ni gritar, sino mas bien conversar con nuestros hijos. Sino hacemos eso nuestros hijos nos temerán, no nos contaran sus penas, alegrías, porque habremos perdido la oportunidad de que nuestros hijos nos vean como sus amigos y confidentes. En la actualidad estamos viviendo un mundo cibernético (Facebook, chat, twitter, internet) dentro del cual se camuflan los delincuentes de todo tipo para arrebatarnos a nuestros hijos y hacerles daño.

Hay que recordar, con cuanto trabajo trajimos al mundo a nuestros hijos que son nuestros tesoros que no tienen precio y son lo continuidad de nosotros mismos, si hasta ahora no conseguimos ser el amigo y confidente, debemos despertar que estamos todavía  a tiempo de proteger a nuestros hijos.

La recomendación a los padres es que busquen la manera de acercarse a sus hijos para que les cuenten sus problemas, sus alegrías, sus amistades, sus proyectos de vida y repetirles una y otra vez de los peligros de tomar una decisión inadecuada, asimismo debemos manejar el facebook, chat, el twitter,la internet como herramientas de acercamiento de nuestros hijos.

En conclusión mas que padres debemos ser amigos y confidentes de nuestros hijos durante toda la vida.